El ‘peeling ultrasónico’ es una técnica que se basa en la eliminación de residuos y células muertas de la piel del rostro mediante la vibración emitida por un cabezal que se pone en contacto con la epidermis. El cabezal habitualmente tiene forma de espátula de acero quirúrgico con la que se van extrayendo las impurezas.
Las ondas emitidas por la máquina del ‘peeling’ ultrasónico tienen una alta frecuencia (más de 20.000 Hz) que consigue eliminar las capas externas de la piel para lograr su limpieza. Además de ello, estas ondas penetran en la piel para aumentar su temperatura, reactivan la circulación sanguínea, fomentan la producción de colágeno y elastina y abren los poros, facilitando la penetración activos.